El ahorro energético es muy importante para todos. Estos cambios de hábitos ayudarán a reducir la factura de la luz:
1. Utiliza la luz natural
2. Apaga luces acuérdate de apagarlas cuando ya no estés en esta estancia de la vivienda. También el uso de bombillas led son una buena solución.
3. Ajustar la potencia eléctrica buena parte de lo que pagas en tu factura es la potencia contratada: cada 1,15 kw de potencia suponen casi 50 euros al año. Por eso es fundamental controlar cuánta potencia contratas. Si en tu casa nunca han saltado los plomos, ni siquiera cuando pones a la vez la lavadora, el horno, el lavavajillas… Puede ser que tengas margen para contratar menos potencia de la que estás pagando.
Aprovecha al máximo la tarifa de discriminación horaria. Una tarifa con discriminación horaria es la mejor manera de ahorrar para casi todos los hogares. Te interesa si eres capaz de concentrar al menos el 30% de la luz que consumes en horario valle (desde las 22 horas hasta las 12; desde las 23 a las 13 en verano). Los hogares que no tienen esta tarifa consumen de media un 50% en horario valle, por lo que sin esfuerzos adicionales podrían ahorrar 80 € al año en su factura de la luz.
• Lavadora: ponla por la noche aprovecha el periodo valle.
• Horno: consume mucho, por lo que, si vas a cocinar algo en el horno, aprovecha y hornea más de un plato.
• Lavavajillas: ponlo por las noches mientras duermes, aprovecharás la energía más barata. El horno y la vitro no pierden el calor de forma inmediata cuando los apagas. Y puedes aprovechar ese calor residual para terminar de hacer lo que estás cocinando.
4. Consume en horas valle
5. Aprovecha el calor residual del horno y vitro
6. Apagar aparatos en stand-by os recordamos que el ‘stand by’ es uno de esos vampiros invisibles que consumo en, aunque no nos demos cuenta. En estos casos el aparato, aunque apagado, sigue consumiendo.
7. Haz un buen uso de los electrodomésticos no todo está en comprar un horno auto-limpiable o una nevera nofrost, eso sí que tengan una buena calificación energética. Hay que hacer un mantenimiento continuo a los electrodomésticos para que funcionen correctamente. La plancha es uno de esos electrodomésticos que consumen más de lo que crees. Necesita una gran cantidad de energía para alcanzar temperaturas tan altas. Por eso es un gran hábito de ahorro centrarnos en planchar toda la ropa que tengamos de una sola vez.